Desde Francia
Andrés Silva
Después de un largo viaje
camino a Francia finalmente llegamos, con la suerte de nuestro lado, ya que al
otro día se lanzo una huelga de controladores aéreos.
Ya desde Portugal pude notar la
indiferencia de la gente a situaciones como las de Turquía, Siria, y otros
tantos conflictos que los gobiernos europeos junto con el de EE.UU provocan a
largo y ancho del mundo en busca de petróleo y materias primas.
Aquí en Francia como en Europa,
la derecha actúa con el mismo libreto que en los países latinoamericanos,
cuando uno prende la TV, o escucha la radio, o lee un periódico, puede darse
cuenta de que el poder económico y sus medios masivos de desinformación apuntan
sobre los mismos objetivos y al mismo tiempo en todas las sociedades. Por
ejemplo, cuando se estaba discutiendo sobre la aprobación del matrimonio
igualitario, grupos fascistas y de derecha salieron a la calle a generar
disturbios mientras la derecha hacía lo suyo desde los medios de comunicación,
pero finalmente no lograron su objetivo y la ley fue aprobada.
Por otro lado la criminalización
de los jóvenes está a flor de piel, mientras se discute como en Uruguay la baja
de la edad de imputabilidad, y desde los medios se genera una campaña para
reforzar la idea de que los jóvenes son todos unos delincuentes y recurren a
los informativos para mostrar como roban, violan, matan, etc. Pero lo
cierto es que se criminaliza a los jóvenes y a los pobres pero no se habla en
esos medios de los verdaderos delincuentes que todos los días funden bancos,
empresas, evaden impuestos, invaden países y matan inocentes, y podríamos
seguir con una larga lista de los crímenes que no se nombran en esos medios.
Me causa una gran indignación ver
en un país que se jacta de tener una gran moral, como privatizan sus pocos
recursos naturales, y como permiten que grandes multinacionales construyan por
ejemplo una central nuclear a solo 1,5km de una ciudad, y con la mentira a sus
pobladores de que tendrían energía gratis por siempre.
En esta zona al sur de Francia
llamada Rhône-Alpes, nos encontramos con la noticia de que en una población
aproximada de 6 millones de habitantes
existe un índice de a alfabetización de 200.000 personas. 200. 000 personas que
no saben ni leer ni escribir solo en esta zona, y claro está que estas personas
son aún más vulnerables a la explotación
y a terminar siendo mano de obra barata para los capitalistas.
Por otro lado me llamó mucho la
atención ver cómo funciona el sistema electoral por estos lados de Europa en
donde nadie cuestiona nada en lugar, pero si ponen en tela de juicio a países
como Venezuela que tiene el sistema electoral más seguro del mundo. Pero
volviendo al tema del sistema electoral en Francia, viendo una noticia sobre
las próximas elecciones municipales, logre ver como se hace el conteo de los
votos, y es como si en Uruguay jugáramos al truco y anotáramos con cuadraditos
hasta completar cinco, y así de cinco en cinco, la verdad después de conocer a
fondo el funcionamiento del sistema electoral venezolano y ver esto siento aún
mas indignación cuando estos gobiernos quieren intervenir en asuntos de otros
países.
Pero bueno, por suerte la gente
comenzó a darse cuenta de que este sistema no es tan bonito como aparentaba, cuando
se tienen que hipotecar por 30 o más años para poder tener una casa y ver que
hacen después para poder pagar los estudios de sus hijos, o cuando para
jubilarse tienen que esperar muchos más años ahora, o cuando los pocos que
tienen trabajo deben aguantar que bajen sus sueldos. Ciertamente esta situación
se va a poner cada vez peor, ya que la crisis económica es cada vez más grande
en la UE, y la solución que están tomando los gobiernos es reduciendo el
beneficio social y laboral.
Cuando hablan en los medios, del
primer y tercer mundo, de los países en desarrollo y de los sub desarrollados,
y tomamos contacto con la realidad ya no sabe uno en donde poner el dedo en el
mapa. Mi pregunta es: ¿en dónde queda el primer mundo?
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